* Casas de cita en la 66, foco grave de infección
* Mentira que haya sana distancia, como insisten las campañas a la población
POR: ANTONIO ORTIZ

Cancún. Antes de que se dispararan los casos de contagio por Covid-19 en Quintana Roo, y las inminentes muertes por contagio, el Gobierno de Quintana, a través de la Secretaría estatal de Salud (SESA), inició una campaña de comunicación para recomendarle a todos a mantener un distanciamiento social y quedarse en casa con el objetivo de evitar que los hospitales y sector salud se vieran avasallados.
Con la entrada de la fase tres de contagio el pasado 21 de Abril en la entidad y a nivel nacional, se exigió a toda persona que anduviera en la calle utilizar cubre bocas, como una medida para evitar más casos positivos y muertes; que hasta este 26 del presente mes se habían registrado en Quintana Roo 603 y 79, respectivamente.
Sin embargo, dichas recomendaciones sanitarias no se aplican para todos los sectores en Cancún, entre ellas las sexo servidoras de la Supermanzana 66, pues la mayoría sigue laborando sin usar mascarillas u otra medida de higiene y prevención, como lavado de manos con gel y sanitizado de cuartos y camas de las casas de cita, al dejarlas las autoridades de salud a su suerte.

Por lo que la 66 es una de las zonas de Cancún más peligrosas de contagio de coronavirus, ignorada por las autoridades de salud de los tres órdenes de gobierno.
Abandonadas a su suerte
El 25 de Marzo pasado, en Cancún se registró la primera muerte por Covid-19, un hombre de 74 años de edad que padecía de diabetes e hipertensión; aunque el 13 del mismo mes, al Gobierno de Quintana Roo no le quedó de otra que confirmar el primer caso positivo de contagio por coronavirus, una mujer italo mexicana que regresó a Cancún tras viajar a Europa.
Desde la primera muerte por coronavirus, hasta la fecha, ninguna de las autoridades de salud de los tres niveles de gobierno ha hecho nada para cerrar las casas de cita de la Supermanzana 66, o mínimo recomendarles a las mujeres protegerse para no resultar infectadas, sus clientes y sus familias.
A principios de Abril, y gracias a denuncias de la ciudadanía que habitan la Supermanzana 66 y de videos que tomaron, se notaba la presencia de las mujeres sin protección alguna, pues ante la necesidad y falta de empleo en toda la entidad no han dejado de ofrecer a sus clientes sus servicios sexuales.
En su momento, vía telefónica el delegado de la Cofepris en Quintana Roo, Miguel Pino, dejó en claro que la dependencia federal no regula el sexo servicio; sólo otorga tarjetas de salud al personal que labora o maneja alimentos y servicios afines.

Aseguró que el sexoservicio es penado por la ley, por lo que la Fiscalía General del Estado debe intervenir para evitar más su práctica.
Entrevistado a parte, el pasado cinco de Abril el director de Salud del Municipio Benito Juárez, Joaquín Barajas, dijo que él no atiende este tipo de situaciones, y reconoció que no sabía que seguía la práctica de las sexo servidoras o que contaran con protección para evitar ser contagiadas o ser transmisoras del coronavirus.
Mencionó que a pesar de las diferentes reuniones de las autoridades de los tres niveles de gobierno para detener la curva ascendente de contagios en todo Quintana Roo y sobre todo en Cancún, nadie había tocado el tema del sexo servicio.
Se comprometió vía telefónica que ese mismo domingo daría parte inmediata al doctor Homero León, titular de la Jurisdicción Sanitaria No. 2, de la Secretaría de Salud de Quintana Roo, para que se dejara de ofrecer el sexo servicio en la 66.
Con cubre bocas y uniforme de enfermeras
A punto de terminar el mes de Abril, y en plena fase tres del contagio, con 79 defunciones y 775 casos positivos a Covid-19 en todo Quintana Roo, hasta este domingo 26 algunas sexo servidoras optaron por ponerse un cubre bocas.
Algunas, más conscientes y para ofrecerle confianza a los cada vez más escasos clientes que se atreven a caminar por las calles de la 66, utilizan provocativos uniformes de enfermeras de la Cruz Roja, de acuerdo a lo visto durante un recorrido realizado por la zona.

Mientras, patrullas municipales de Seguridad Pública de Benito Juárez realizan constantes patrullajes todo el día, sin exigirles los uniformados a las mujeres y a sus clientes usar cubre bocas; ni mucho menos atreverse a cerrar las casas de cita y dejar de practicar el viejo oficio, al no recibir órdenes de sus jefes superiores.
Pero en caso de que lo intenten, posiblemente habrá disparos y muertes, al ser la 66 uno de los puntos rojos o barrios más inseguros de Cancún por su alto grado de robos, ejecuciones y venta de drogas a cualquier hora del día.