Cancún, 11 de enero.– Desde muy temprano comenzaron las movilizaciones en Cancún, de unidades del Sindicato de Taxistas ‘Andrés Quintana Roo’ y otros sindicatos del estado, para ejercer ‘presión’ al Poder Judicial de la Federación, en protesta al gran temor de que se determine que la plataforma digital Uber, finalmente sea una opción para los ciudadanos y turistas.
Pese a que sus ‘líderes’ han asegurado que se trata ese una protesta pacífica, frente al edificio del Poder Judicial de la Federación y que ‘no afectaría’ las vialidades, como es su costumbre, los primero que hicieron fue cerrar parcialmente algunas avenidas aledañas, provocando un caos vial, pues lo que menos les importa es el ciudadano, ni como se traslade a su trabajo o casa, lo único que pretenden es evitar la sana competencia -porque tienen todas las de perder-.
Muchas protestas de taxistas de Quintana Roo, se han focalizado en diferentes avenidas de Cancún, algunas contra un Juez Federal, por conceder un amparo a favor de Uber. Además, taxistas de Chetumal y Playa del Carmen se sumaron a las manifestaciones, contra el posible fallo judicial que permitiría la entrada de Uber y otras plataformas.
Por su parte, la Dirección de Tránsito publicó en sus redes sociales que, para garantizar el orden vehicular, colocaron oficiales para agilizar la vialidad sobre la avenida Andrés Quintana Roo, Kinik, Comalcalco, Kohunlich, Kabah, Xcaret y Cobá.
Sin duda, por el irrestricto abuso de poder, por su desprestigio ante los sectores de la sociedad, el Fiscal General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, debe irse ya de la institución que le tocó encabezar a partir de que fue modificada en su ley orgánica en la presente administración federal.
Desde el más modesto estudiante de Derecho hasta el más letrado de los juristas, sabe que el funcionario falló a su encargo, a su prestigio y a su “moral” porque fue capaz de inventarle cargos que no están clasificados en el Código Federal Penal a su ex cuñada, Laura Morán, pareja de su hermano Federico durante más de 50 años.
Y de verdad hay que ser un amoral para actuar de esa forma abusiva del poder que le otorgó el presidente López Obrador, como para acusar a la mujer de su consanguíneo de uno y mil cargos y así poder encarcelarla.
Por supuesto que por la arbitrariedad del otrora titular de Seguridad Pública federal en el sexenio de Vicente Fox, tampoco tuvo empacho para también enjuiciar y detener a Alejandra Cuevas, hija de Laura Morán, a quien tuvo en prisión 528 días como se corroboró de manera legal por un delito que ni está catalogado, llamado “garante accesoria”.
Si bien es cierto que Gertz Manero tenía una trayectoria controversial por azares de su propia profesión, con el encarcelamiento de las referidas Laura Morán y Alejandra Cuevas cavó su propia tumba, si no legal, sí moral por los abusos cometidos los que incluso le fueron exhibidos mediante las grabaciones que se ventilaron en los medios de comunicación y las “benditas” redes sociales.
Sin embargo, con todo lo narrado y enfrentado por el todavía fiscal, era para que hubiese presentado licencia al cargo –porque el mismo es irrenunciable- y dar paso para irse si no tan censurado, si al menos con la dignidad que requiere la serie de movimientos de arrogancia y prepotencia que dio y se hicieron públicos.
Empero, como ya es costumbre y de lo que han abusado los personajes como Gertz Manero, -cercanos al Jefe del Ejecutivo federal- para permanecer en el cargo, se victimizan para persistir en el mismo y seguir con el exceso y abuso del poder que en apariencia es casi siempre un pingüe negocio.
Con todo y la exhibida pública del autoritarismo gertziano, su 11-0 en contra de los ministros de la Corte, el fiscal le rendirá honor al viejo lema del whiskey escocés, “y sigue tan campante”, como si los audios ventilados y las declaraciones de sus familiares no se refirieran al también jurista.
Quiera o no, acepte o niegue, antier cayó otro más de los arietes de López Obrador, al que le rendía pleitesía y deferencias constantes, porque así de sencillo, el mandatario creía en él. ¿O creerá?
Lo que persiste en ser ilógico es que el presidente sostenga a Gertz no obstante todos sus enredos y los graves excesos cometidos de manera lacerante y que pone en entredicho la autoridad del jefe del Ejecutivo federal.
Quizá en otro escenario, la exhibición del Fiscal General de la República ante los medios de comunicación hubiera significado un escándalo mayúsculo. Pero la complacencia del tabasqueño a quienes considera sus amigos, reflejan de forma real cuáles son sus limitantes y hasta dónde pueden llegar, no importa cuál haya sido su falla o su pecado capital.
Cinismo. Complicidad. Frivolidad. ¿Cuál es el rostro verdadero de Alejandro Gertz Manero, Fiscal General de la República, caradura? Usted tiene la mejor opinión, amable lector.
Notas de Trascendencia
El grupo parlamentario de Morena y sus aliados frenaron un punto de acuerdo para citar a comparecer en el Senado de la República a los responsables del Tren Maya.
Con dicha presencia, se pretendía llevar a la tribuna más alta del país a Javier May Rodríguez, titular del Fondo Nacional de Promoción Turística (Fonatur); a María Luisa Albores González, de Semarnat, y a Blanca Alicia Mendoza Vera, de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), para que dieran a conocer todos los permisos inherentes a la obra insignia de esta administración gubernamental.
Como ello no se llevará a cabo porque no se reunió en votación abierta en el Senado de la República por la falta de quorum, la bancada del PAN en la Cámara Alta arremetió y acusó al presidente Andrés Manuel López Obrador de que incumplió su promesa de no causar afectación alguna a la flora y fauna de la región, ya que aunque lo niegue el mandatario, se han talado miles de árboles en la selva media por donde pasará el Tren Maya.
Originado por toda la catástrofe a la que llevan las obras de dicha construcción, Greenpeace y representantes de distintos colectivos y organizaciones realizan manifestaciones en Quintana Roo y en la Península de Yucatán para detener, de forma simbólica, las obras que se ejecutan en el tramo 5 del Tren Maya que va de Cancún a Tulum.
La organización desplegó una manta con el mensaje, Protejamos la selva maya, mientras ocho activistas se ‘inmovilizaron’ con el cuerpo pegado a la maquinaria.
A través de imágenes, Greenpeace denunció la profunda devastación en la zona, que se extiende a por lo menos 30 kilómetros de selva con 60 metros de ancho.
Personas expertas y activistas de organizaciones como Siempre Unidas AC, Jaguar Wildlife Center, Centinelas del Agua, Red de Formadores Socioambientales y MOCE Yax Cuxtal A.C. han mostrado preocupación debido a los impactos negativos que tendrá la construcción de ese tramo.
Y habrá que agregar en el último de los cuatro cambios de su trazo, la ruta se adentra cada vez más en la selva, lo que contraviene la promesa de conservar un trazo sobre el derecho de vía existente, además de que no hay Manifestación de Impacto Ambiental (MIA).
Cancún, 28 de octubre.-Mientras las autoridades estatales y municipales en Quintana Roo están más concentradas en lo que será el próximo proceso electoral local, donde se elegirá nuevo gobernador, la delincuencia organizada y la desorganizada siguen haciendo de las suyas a lo largo y ancho de una entidad cada vez más golpeada.
Balaceras, ejecuciones, cobro por ‘derecho de piso’ ‘levantones’ y muchos otros delitos de alto impacto, siguen dañando con más frecuencia la entidad, en particular a la Zona Norte, donde incluso, ya se han emitido alertas de viaje por la alarmante inseguridad que ya ha cobrado la vida de turistas extranjeros.
El reciente tiroteo en Tulum, que dejó a dos turistas muertos y tres más heridos, provocó que otras naciones voltearan a ver con mayor preocupación a Quintana Roo y en particular a Cancún, donde todos los días se registran hechos violentos y el más reciente fue el del martes por la tarde, donde un automovilista fue ejecutado en una de las principales avenidas de la ciudad y a escasos metros de donde se ubican las instalaciones de los cuerpos policiacos.
El hecho se registró sobre avenida Luna, a la altura de la Supermanzana 505, a plena luz del día y ante la mirada incrédula de la gente, pues el conductor de una camioneta Ford Explorer color gris, acababa de se acribillado, sin que se reportara la detención de nadie.
Así, las autoridades policiacas de todos los niveles de gobierno se han visto rebasadas por la creciente inseguridad, por una lado, la Policía de Cancún, que llega tarde a todos lados y no previene nada, por otro la FGE que mientras inicia una investigación por algún delito de alto impacto, de inmediato ocurre otro.
Mientras que la Guardia Nacional no hace pesar su condición y supuesta preparación para el combate a la delincuencia y para terminar la Fiscalía General de la República (FGR), delegación Quintana Roo, que sencillamente no existe, pese a que la mayoría de los delitos tienen que ver con el orden federal y como se ha venido haciendo desde hace varios años, se desentiende de su labor, dejando ‘el paquete’ a la FGE que ya no puede con tantas investigaciones abiertas.
De esta forma, no se ve por donde sean frenados estos ‘ríos de sangre’ que han bañado a los destinos turísticos más importantes de Quintana Roo y aunque esparemos que la situación mejore, la realidad, es que se ve muy lejos que suceda.
Cancún, 26 de julio.– Repunte en contagios por coronavirus, fiestas clandestinas, filas en muelles sin sana distancia, son solo algunos de los temas que han provocado que Quintana Roo sea tendencia negativa en redes sociales, por el tibio actuar de las autoridades, pues tal parece que lo único que importa es que el turismo siga llegando sin importar si hay pruebas o no para descartar que turistas contagiados ingresen a la entidad.
Recordemos que hace unos meses se descubrió que laboratorios ‘patito’ cobraban por entregar falsos negativos a Covid-19, provocando que varios estudiantes argentinos regresaran a su país con el virus, pero con un papel con resultado negativo.
Y es que mientras en algunos municipios como Benito Juárez decidieron sancionar a los necios que siguen sin usar cubrebocas en las calles -solo locales por supuesto-, el transporte público sigue como si la pandemia no existiera, cuando lo único que no existe son los operativos de vigilancia para evitar que las combis vayan como latas de sardina, llenas y en el peor de los casos, con pasajeros y hasta choferes sin cubrebocas, situación que ninguna autoridad verifica, sencillamente porque no les interesa.
Lo más absurdo es que obliguen y hasta arresten a ciudadanos por no cubrir boca y nariz cuando caminan por la calle, mientras que dentro de las combis no se respeta nada y eso lo pude ver todo mundo, menos quienes tienen tan geniales ocurrencias.
Autoridades ciegas o simplemente omisas
Por su parte, las autoridades estatales advirtieron recientemente, que se han realizado operativos en hoteles, yates y zonas de playas, principalmente en Isla Mujeres en donde se han detectado las famosas fiestas clandestinas, donde no se respetan las más mínimos protocolos sanitarios, fiestas que iniciaron hace varios meses en Tulum y a pesar de cierres y sanciones, se siguen haciendo lo que quiere decir, que poco importan esas sanciones, seguramente por tibias, aunque se informó, que ahora sí tendrán mano dura, pues donde las observen que el aforo supera el 50% permitido, el lugar será clausurado.
Aunque recientemente en redes sociales se difundieron fotografías y videos de cientos de turistas que hacían fila -muchos sin cubrebocas-, ni sana distancia para cruzar de Playa del Carmen a Cozumel como si nada, siendo un enorme foco de infección el cruce y sería ahí donde las autoridades deberían intervenir, si es que en realidad les preocupa que exista un freno en la ola de contagios y evitar mala propaganda como sucedió recientemente con los estudiantes poblanos que se contagiaron de forma masiva en Cancún porque no se cuidaron y porque los antros y el hotel donde estuvieron, tampoco procuraron que se cumplieran los protocolos sanitarios y fue justo, cuando las autoridades federales admitieron abiertamente que existía una nueva oleada de contagios que inició en estados turísticos como Quintana Roo, Yucatán y Baja California Sur y se extendió en casi todo el país.
Además, a finales de junio, 26 estudiantes bolivianos se contagiaron de Covid-19 durante su estancia también en Cancún y estos casos son solo algunos que han sido difundidos, pues seguramente hay más que permanecen ocultos y lo que podría generar tarde o temprano, una alerta de viaje por Covid.
Se avistan sendas alertas de viaje para Cancún
Pero no todo lo que está sucediendo en Quintana Roo y principalmente en Cancún tiene que ver con el coronavirus, pues el tema de la inseguridad, -que desde luego no es nuevo, pero que día con día se recrudece más-, ya habría cobrado su primera víctima a nivel turístico, con el hallazgo sin vida de un bombero estadounidense que vacacionaba en este polo turístico y pese a que la investigación recién inició, ya hay contradicciones en el caso, pues mientras los familiares hablan de un secuestro y posterior asesinato del bombero texano, las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) en Quintana Roo, informaron recientemente que no se han encontrado evidencias de violencia y que el caso podría tratarse de un accidente.
Sin embargo, ahora las autoridades locales y apoyándose en su tecnología de punta y sus sofisticadas herramientas, deberán sustentar con evidencia sólida y demostrar al consulado, a los familiares y al cuerpo de bomberos de Arlington, Texas, que no se trató de un crimen, de lo contrario en breve el gobierno de Estados Unidos no dudará en emitir una alerta de viaje por inseguridad para Cancún.
Y es que hay que mencionar, y como todos sabemos, la violencia en Cancún (en sus regiones y supermanzanas) es de todos los días, con ataques a balazos, ejecuciones o intentos de ejecución, aparición de narcomantas amenazando a narcomenudistas, a taxistas o incluso hasta autoridades de las distintas corporaciones policiacas.
Recientemente en varios operativos en la zona selvática de la delegación de Alfredo V. Bonfil, en la periferia de la ciudad, la FGE descubrió diversas fosas clandestinas con restos humanos, que desde luego, se desconoce por el momento, a quiénes podrían pertenecer, pues del 2013 a la actualidad se calcula que en Quintana Roo existen aproximadamente mil 700 personas desparecidas.
Ante la grave e imparable ola de violencia e inseguridad en Cancún, se improvisa con operativos que de nada sirven, pues la delincuencia sigue haciendo de las suyas.
Apenas este lunes, la Policía de Cancún anunció que se reforzará la vigilancia en coordinación con autoridades policiacas de todos los órdenes de gobierno, con el operativo denominado “Vive Seguro Benito Juárez”, bonito nombre, pero nada más alejado de la realidad hoy en día.
Según el comunicado, estos operativos servirán para intensificar las medidas de prevención y lograr una reacción en los hechos que pudieran registrarse en la ciudad.
“El firme compromiso es con la sociedad benitojuarense para mantener la tranquilidad en la ciudad y lograr un Cancún cada vez más seguro para todos”.
Con la participación de oficiales preventivos y de tránsito de la Policía Quintana Roo de Benito Juárez, SEDENA, SEMAR, Guardia Nacional y Policía Estatal, se orienta la operatividad de las fuerzas de seguridad en la atención de áreas prioritarias, reza el comunicado.
Por ello, las fuerzas del orden se encuentran de manera permanente patrullando, vigilando y estableciendo operativos de seguridad en distintas regiones de la ciudad, poniendo puntual atención en la protección de los ciudadanos y en la prevención de hechos ilícitos para generar mejores condiciones de seguridad pública, concluye el boletín.
Esperemos que -como es costumbre,- estos operativos no queden solo en buenas intenciones, para intentar disminuir la percepción de inseguridad en los ciudadanos y que realmente se apliquen las autoridades para frenar la ola de violencia que hay en el destino, pues sin voluntad nada se podrá hacer para revertir esta delicada situación que se vive desde hace años en Cancún y que lejos de mejorar, parece empeorar…en fin, al tiempo.
Cancún, 4 de junio.– El proceso electoral que se vive en México y que culmina este 6 de junio con las votaciones, es sin duda el más grande y quizá el más significativo en la época moderna del país, pues hay muchas cosas en juego y ya se han considerado como unas elecciones históricas.
Amén de ello, por desgracia los periodos de precampaña y campaña estuvieron plagados de una violencia inusitada prácticamente en todo el territorio nacional. Según diversas consultaras, desde el inicio del proceso electoral se documentaron cerca de 800 agresiones o delitos contra políticos (89 homicidios, de los cuales 35 eran candidatos para algún cargo de elección popular).
Además, el proceso ha sido sin duda, atípico por diversas circunstancias como la pandemia por Covid-19, lo que provocó que los candidatos no aprovecharan todos los días de campaña para salir a las calles, pero además los que salían y hablaban de sus propuestas, éstas eran en su mayoría recicladas, carentes de sustento y en el peor de los casos, con muchos candidatos sin propuestas, pero eso sí, mucho circo como en el caso de Guerrero o en otras entidades, municipios o distritos electorales, donde los aspirantes se ocuparon más de su ‘imagen’ en los ‘spots’, modificando canciones, bailando o hasta haciéndola de súper héroes con anuncios poco ingeniosos y de mala calidad, que solo provocaron la burla y desde luego los famosos memes de los ciudadanos en las redes sociales.
El circo de las campañas en México
Tristemente durante este proceso nos tuvimos que tragar varias semanas de propaganda política con más circo que ideas o propuestas reales. de hecho eso convierte a México en uno de los pocos países -si no es que el único- donde hemos visto de todo y nuestra capacidad de asombro fue superada cada día, con candidatos luchadores, payasos, deportistas o gente de la farándula, que lejos de proponer acciones de interés para los ciudadanos, únicamente mostraron su completa ignorancia y poca sensibilidad en los temas delicados.
La imparable violencia
Uno de los temas en los que prácticamente todos los candidatos del país coincidieron, fue la inseguridad, pero sobre todo que el proceso se convirtió en el más virulento de que se tenga memoria, tan es así, que medios internacionales como The Washington Post dedicó una publicación que relaciona a los partidos políticos con el crimen organizado para controlar los territorios, algo que no es nuevo, pues estas células se han inmiscuido con total impunidad desde hace años, pero llama la atención que medios internacionales retomen ese delicado tema.
Y por desgracia Quintana Roo no se salvó de esa narcoviolencia, con la ejecución en Puerto Morelos de Ignacio Sánchez Cordero, virtual candidato a la presidencia municipal, quedando su viuda Blanca Merari Tziu Muñoz en su lugar, misma que habría sido víctima de dos atentados y días después fue detenida y vinculada a proceso por su presunta participación en el asesinato de Sánchez Cordero, Karla Odeth Vivas, hermana de Yazmín Vivas, candidata a presidenta municipal de Puerto Morelos por el Partido Encuentro Solidario, lo que dejará una imborrable huella en toda la entidad por estos violentos hechos, que ojalá no se repitan, pero que desafortunadamente dejan al descubierto, la evidente presencia del crimen organizado en la política de algunos municipios del estado.
Se espera que las elecciones de este domingo sean de alta participación, pese a la inseguridad y por supuesto por la coyuntura de estas votaciones que se dan en medio de la emergencia sanitaria por la pandemia…aún así y con todas las medidas de higiene y protocolos de salud ¡sal y vota!.
Cancún, 30 de abril.-A los ataques armados a plena luz del día, en el centro de Cancún, en colonias irregulares y hasta en la Zona Hotelera, además de ejecuciones prácticamente todos los días, sin mencionar asaltos y otros delitos cometidos por la delincuencia común, se han sumado en los últimos días, diversos actos incendiarios y disparos contra unidades del transporte público (específicamente combis), supuestamente como advertencia por el pago de ‘derecho de piso’ o por lo que sea, pero esta parece ser la “nueva realidad” de Cancún, vanagloriado a nivel nacional e internacional por sus hermosas playas, pero sumido en una crisis de violencia e inseguridad para los que aquí vivimos, mientras que las autoridades estatales y municipales están más ocupadas en las próximas elecciones, que en frenar la grave situación que aqueja al destino.
La activación casi todos los días del famoso Código Rojo, que solo Dios sabe para qué sirve, la desconfianza hacia las autoridades encargadas de procurar justicia y la incapacidad de los cuerpos policiacos para prevenir ilícitos, han provocado que la delincuencia haya tomado las riendas y sea quien ‘gobierne’ Cancún, ante la incapacidad y ausencia de las autoridades.
Y peor aún, en medio de unas grises y recicladas campañas políticas, con personajes que se la pasan ‘cacareando’ los mismos discursos electoreros de siempre y prometiendo lo que bien saben no podrán cumplir.
Ese ha sido hasta hoy, el escenario y el común denominador de los aspirantes, ya sea para una diputación o para la presidencia municipal de Benito Juárez, donde nadie ha propuesto alguna estrategia nueva para frenar la ola de violencia e inseguridad que se vive en el destino, sencillamente porque no la tienen.
Faltan cinco semanas para las elecciones y en honor a la verdad, seguiremos viendo y escuchando más de lo mismo, verborrea electorera con promesas de un cambio que no llegará sea quien sea el próximo alcalde o viviremos más de lo mismo en caso de repetir Mara Lezama.
Como sea, el futuro a corto plazo para Cancún no pinta nada halagüeño y la inseguridad sigue siendo una seria amenaza para el destino, pese a los esfuerzos de los empresarios por atraer a más turistas y por dar a conocer los atractivos de la ciudad, que sobra decir, además se ha visto severamente afectada por la pandemia y por desgracia la situación no mejorará, a menos que las actuales autoridades muestren voluntad para revertir las cosas en beneficio de Cancún, voluntad que evidentemente no han tenido.